Los días en los que el whisky se asociaba con situaciones solemnes han quedado atrás. Hoy, el destilado escocés ocupa un lugar especial en las mesas de los bares y restaurantes más trendy, donde se combinan la actitud desenfadada con los beats del reggaetón y las notas frescas de la coctelería contemporánea.
Ballantine’s Wild, con su nuevo sabor a cereza, forma parte de esta nueva experiencia de diversión. Decir que se trata de un whisky puro sería una equivocación. Esta edición de Ballantine’s es un licor de whisky con sabor cereza que tiene como base la mezcla de Ballantine’s Finest, votado como el mejor escocés mezclado del mundo en 2020, pero de menor graduación alcohólica. La base —de color oro claro, aromas suaves a miel y especias, y sabor equilibrado de vainilla que deja en boca un sabor fresco y floral—, se combina con las notas de la cereza dulce y la almendra. El resultado, entre dulce y ácido, es perfecto para el paladar mexicano.
La mejor manera de tomarlo es en un Wild & Tonic, un trago insignia que además de ser fresco, es muy fácil de hacer.
- 60 ml. de Ballantine’s Wild
- Top de agua tónica
- Rodaja de limón verde