Con más de una década de historia al sur de la Ciudad de México, Eloise Chic Cuisine ya tiene platillos que se consideran clásicos. Para maridarlos, Eloise y Cava Morada proponen vinos relajados, pero con gran calidad, tal como reza la filosofía de este bistrot.
La crème brûlée de foie gras es una creación de la chef Nasheli Martínez. “Es el plato más vendido de Eloise, lo hemos llevado a todos los festivales y no deja de sorprender a quien lo prueba”, señala Abel Hernández, también chef y pareja de Nasheli. Uno de los maridajes sugeridos para este postre, que combina aromas inesperados de maracuyá, es un vino blanco espumoso Relax Riesling. O bien, un espumoso de Tsarine, blanco o rosé.
Otro de los consentidos de los clientes habituales de Eloise es el short rib à la bourguignon, un platillo que se ha ido perfeccionando y cuya salsa, con ingredientes como piloncillo y balsámico, es compleja y suculenta. Junto a éste se puede colocar la sopa de cebolla: su fondo de res con gran cuerpo y la consistencia crujiente del pan la hacen perfecta a cualquier hora del día. Para estos dos platillos sugerimos el vino tinto Tierra de Ángeles Nebbiolo.
El risotto con escargots es una delicia cremosa que ofrece una forma distinta de comer caracoles, aunque pronto podrían cambiar de presentación: en vez de risotto, una lasaña. En cualquier caso, el vino tinto Alma Serena es muy adecuado.
Finalmente, los huevos rotos. Sin temor a equivocarnos, estos son los mejores de la Ciudad de México. Preparados con mantequilla, jamón ibérico, ajo, cebolla y un toque final de trufa rallada, son una delicia reconfortante y entrañable. Maridarlos con un vino tinto Díaz Bayo 15 es una excelente opción.
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