Costa Oaxaqueña: manglares y hermosos atardeceres

Un espacio natural inigualable en el Pacífico mexicano.

Pensar en las costas de Oaxaca es trasladarse a un espacio natural inigualable en el Pacífico mexicano. Más allá de su fama surf, te invitamos a descubrir sus playas, su comida, su mezcal y sus increíbles proyectos culturales.

Más allá de su capital, Oaxaca guarda hermosas playas conocidas más por los surfistas que por el turista convencional. En tiempos recientes, la arquitectura, el diseño y la gastronomía le han dado un aire más sofisticado, sin perder su identidad. Gracias a los ríos que en temporada de lluvias bajan por la Sierra Madre hacia el Pacífico, encontrarás manglares en lagunas costeras como Chacahua y Manialtepec, donde se puede observar el fenómeno de bioluminiscencia.

Casona Sforza es un proyecto único que surge de la idea de conservar las tradiciones y crear una comunidad con una economía circular. La arquitectura del hotel, con grandes bóvedas y arcos, resalta la belleza del paisaje. La carta de su restaurante es una muestra de la cocina oaxaqueña de autor que utiliza insectos y flores.

Otra alternativa es Monte Uzulu, un hotel en San Agustinillo que está rodeado por las montañas de la Sierra Madre del Sur y enmarcado por las olas. Cuenta con once habitaciones en un estilo que navega entre lo minimalista y lo bohemio. Su restaurante Temporada hace honor a su nombre y varía su carta para ofrecer platillos con ingredientes locales, saludables y frescos.

Almoraduz es el restaurante de Shalxaly Macías y Quetzalcóatl Zurita. Ofrecen una cocina de autor que ha estudiado a fondo la gastronomía oaxaqueña para hacer una nueva propuesta que enaltece el consumo local.

Oaxaca es mezcal. Y si estás en la zona de Punta Pájaros no te puedes perder Bar Cobarde, con una selecta carta que destaca la labor de distintos maestros mezcaleros y un menú que cambia a diario.

Hay dos experiencias que te harán enamorarte para siempre de esta costa. La primera: relajarte, meditar y consentirte en la Terma El Papelillo. Y la segunda: visitar Casa Wabi, construida en un terreno de 25 hectáreas para el intercambio de ideas, exposiciones de arte y fomento cultural. Muy cerca está Hotel Escondido, de Grupo Habita; su estilo desenfadado, minimalista y con olor a surf conquistará a los que admiran la decoración cuidada a detalle. Del mismo grupo, a las afueras de Puerto Escondido está Terrestre, un hotel de arquitectura impecable que trabaja con energía solar.

Naturaleza, surf, amigos y comida deliciosa. ¿Qué esperas para visitar las playas de Oaxaca?

 

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