La historia del mezcal se remonta a siglos atrás; su presencia en la cultura ha sido constante y su popularidad creciente es producto de una revaloración de las tradiciones de los pueblos mexicanos. La combinación de calidad, diversidad de sabores y prácticas sostenibles ha atraído a un público más amplio, y el mezcal se ha convertido en una bebida emblemática tanto en México como en el extranjero. Su historia y su auge reciente reflejan las tradiciones y el patrimonio de un país multicultural como México.
Al ser una bebida tan antigua, el mezcal está asociado a distintos rituales y ceremonias. A lo largo de la historia, se han desarrollado diversos rituales en torno al mezcal que simbolizan la conexión con lo divino y la veneración de los antepasados.
Un ritual moderno de consumo del mezcal es acompañarlo con una rodaja de naranja, la cual le aporta un toque cítrico y ácido que contrasta con la intensidad y el ahumado característico del mezcal. Al mezclarlos, la acidez de la naranja puede ayudar a equilibrar y suavizar el sabor del mezcal, creando una experiencia sensorial más agradable para algunos paladares. Además, el cítrico actúa como un “limpiador de paladar”, ayudando a refrescar y preparar la boca para el siguiente sorbo de bebida.
Otro ritual notable en nuestros tiempos es la cata de mezcal. Una cata implica apreciar y evaluar las cualidades de una bebida a través de los sentidos. Los catadores examinan el color, el aroma y el sabor del mezcal, utilizando copas especiales y técnicas de degustación. Este ritual permite descubrir las distintas notas y perfiles de sabor del mezcal, y es una forma de profundizar en su apreciación, además de acercarnos a distintas variedades de esta bebida.
Finalmente, algunas personas han adoptado un ritual moderno que involucra encender una ramita de canela o un palito de copal como una forma de honrar al mezcal antes de beberlo. Este gesto simbólico de purificación y conexión con la naturaleza aporta un elemento adicional al ritual de consumo y crea una experiencia sensorial más completa.
El mezcal es un regalo de la naturaleza, destilado por manos sabias y entregado con amor, un misterio que despierta los sentidos y conecta con lo divino. Te invitamos a sentir sus complejos sabores con sabiduría y responsabilidad.