Para Bacardí, México ha representado grandes éxitos e innovación: las marcas Bacardí Añejo y Bacardí Solera han encontrado un hogar en nuestro país. En México, Bacardí se convirtió en pionera en bebidas preparadas listas para hacer cocteles, como los famosos Cocteles Bacardí, además de crear campañas icónicas de publicidad y certámenes musicales. En sus instalaciones pueden encontrarse obras de arquitectos icónicos reconocidos mundialmente por las altas escuelas de arquitectura de talla internacional, como el único edificio del arquitecto Mies van der Rohe en América Latina, así como estructuras diseñadas por el famoso arquitecto Félix Candela. No solo eso: dentro de un mercado mexicano creciente en competencia, calidad y un público buscando nuevas experiencias, Bacardí ha incursionado con dos tequilas propios: Tequila Patrón y Tequila Cazadores, marcas que comparten la filosofía y valores de la casa Bacardí.
En la actualidad, Bacardí Carta Blanca es la bebida más consumida por el mercado mexicano. El portafolio de rones saborizados satisface a cualquier paladar: Bacardí Mango Chile, Bacardí Raspberry y los clásicos rones añejos: Bacardí Añejo, Bacardí Solera, Bacardí Reserva 8, Bacardí Reserva 10 y Bacardí Reserva Limitada. El resultado de casi un siglo de tradición y evolución es una marca sintonizada con el mercado mexicano.
La mejor forma de disfrutar este ron es con una Cuba Libre. Necesitarás un vaso de 12 oz lleno de cubos de hielo; 45 ml de ron Bacardí Carta Blanca y tres gotitas de limón con semilla. A esta mezcla se le deja el cachetito del limón como garnitura y se vierte el refresco en el vaso. El secreto está en no revolver: el ron pesa menos que el refresco y una vez que se vierte, se irá distribuyendo de forma balanceada. El éxito de una buena cuba libre es recibirla con la burbuja de refresco, dándole la frescura necesaria para alzar nuestro vaso y decir “¡Salud!”.
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